DE BUENO A GRANDIOSO
Posted by Mariana Scaravilli on Oct 9, 2017

 

I

¿Cómo vamos de lo bueno a lo grandioso?

Primero, vamos de lo malo a lo bueno. De Principiante a Maestría es demasiado lejos. El proceso se mueve: de novicio a profesional a maestría. Luego, comenzamos donde estamos: somos un desastre. Pero a lo mejor deseamos mejorar nuestro tocar. Luego, comenzamos con un objetivo. Mi objetivo a los once años era ser el mejor guitarrista del mundo. A los once no tienes que ser muy realista, y fue un objetivo.

Segundo, necesitamos a alguien que ha estado ahí antes. Es decir, necesitamos a alguien que sepa más que nosotros. Convencionalmente, encontramos un instructor, un docente o un mentor. Es necesario que encontremos una persona en el peldaño de la escalera por encima de nosotros. No es necesario, y es improbable, que encontremos a alguien dos o tres peldaños de la escalera sobre nosotros que esté preparado para darnos instrucción personal. Es posible que, de vez en cuando, podamos encontrarnos a alguien de una estación más elevada.

Tercero, nos levantamos de la cama. Esto parece una tontería pero si has conocido a tantos músicos jóvenes como yo, levantarse de la cama es ya un reto. Y levantarse de la cama es una experiencia cualitativamente diferente en las otras estaciones.

Cuarto, practicar. Practicamos el instrumento, el vocabulario, el repertorio, escuchar y ¡tocar! En los niveles más elevados de tocar, esto va desde tocar a la extemporización a la improvisación a la composición espontánea. Pero recuerda siempre tocar. Y no olvidemos escuchar.

Quinto, trabajamos con gente que es mejor que nosotros. Si estamos trabajando con un grupo de gente y somos malos, malos de verdad, si queremos subir nuestro promedio a que sea un poco tolerable, tenemos que trabajar con gente que sea muy, muy buena, por encima, como para bajar su promedio y subir el nuestro. Así, como músico joven, yo me propuse ser capaz de tocar cualquier cosa que alguien me pidiese tocar. Entonces, un día, el teléfono sonaría y un mejor músico pediría ¿puedes hacer este concierto? Alguien cae enfermo, o necesita dejarlo, y un día tendremos una oportunidad para trabajar con mejores músicos – si estamos preparados.

Sexto, trabaja mucho. Trabajar mucho, tanto como podamos. Si resulta que somos muy, muy malos, el trabajo no vendrá a nosotros. Si incluso somos medio malos, o incluso tolerables, el mundo nunca habrá sabido de nosotros y el trabajo no vendrá a nosotros. Luego, el principio es nosotros vamos al trabajo. En Wimborne, Dorset, en 1967 esto significaba irse a Londres.

Séptimo, cuando estamos desempleados o entre compromisos, seguimos practicando: continuamos practicando. Cuando me fui a Londres y vivía en el número 93a de Brondesbury Road a la salida de Kilburn High Road, la vida era dura. Así, cuando estaba desempleado, practiqué dos a cuatro a seis a ocho a diez a doce horas diarias. Cuando trabajamos, cuando tenemos un empleo, no podemos practicar doce horas al día.

Así:

            tenemos un objetivo.
            recibimos instrucción de alguien que sabe más que nosotros.
            nos levantamos de la cama.
            practicamos.
            trabajamos con gente mejor.
            vamos al trabajo.
            cuando estamos entre compromisos continuamos practicando.

Si adquirimos competencia suficiente, pericia, quizá somos incluso un novicio-experto, alguien puede reconocer, admitir o verificar la calidad de nuestro trabajo. Éste es un punto en el cual estamos cerca de hacer la transición de novicio a profesional-principiante. En este punto, mejor estar atento cuando el teléfono suena.

 

II

Una práctica requiere fiabilidad, repetibilidad, y respons-habilidad.
Una disciplina confiere efectividad en el tiempo.

Una disciplina es un cuerpo de prácticas que, puestas juntas, forman la estructura de nuestra arquitectura interior.

El músico tiene tres disciplinas: de las manos, del corazón y de la cabeza.
Puestas juntas éstas forman una disciplina equilibrada y armoniosa.

En una práctica o disciplina de Guitar Craft, prestamos atención al comienzo del día, prestamos atención al final del día, y entonces prestamos atención a lo que está en medio.

La recapitulación es un elemento de una práctica fácilmente olvidado. Nuestra experiencia del día se nos escapa.

La palabra clave es atención. La calidad de nuestra atención determina la calidad de nuestra práctica y disciplina. La calidad de la atención determina la calidad de nuestras vidas. No es muy exagerado decir que todo lo que tenemos en la vida es la calidad de nuestra atención.

 

Practicum
Miércoles 7 de julio de 2010
Camp Caravan, Royalston, Massachusetts

 

 

Siguiente artículo

DISCOVER THE DGM HISTORY
.

1940s
1950s
1960s
1970s
1980s
1990s
2000s
2010s
.